Hay
pocos temas para la afición de Madrid y en general, para la afición del toreo a
nivel nacional e internacional, que genere tantas discrepancias entre los
aficionados: ¿es verdaderamente “el Juli” un auténtica figura del toreo?
Algunos
dirán que es una falta de respeto y de conocimiento de la fiesta el cuestionar
este tipo de cosas: para unos es un fenómeno descomunal del toreo y para otros
es un torero acomodado que según ha ido cumpliendo años como torero ha ido
toreando cada vez los toros más anovillados. Lo que está claro es que el
diestro madrileño ya es su segundo año que no va a pisar Madrid. ¿Es
fundamental que vaya a Madrid? Pues yo digo que sí, porque todas las figuras
deben torear en Madrid, ya que se torea ante el público más exigente y porque
es la plaza donde más cuentan los triunfos.
“El
Juli”, desde que en 2007 saliera a hombros en la feria isidril, no ha vuelto a
salir por la puerta tan preciada para todos los toreros que da a la calle
Alcalá. En algunas tardes ha cortado alguna oreja -siempre cuestionadas- pero nunca ha tenido una gran tarde que se
recuerde de vez en cuando. Porque recuerdo esto; porque “el Juli” ha tenido
cuatro años para cuajarse como torero de Madrid y no lo ha conseguido. El
porqué de ello, pues se puede deber a muchas causas, pero la principal es que
siempre ha ido buscando el toro flojo, recogido de pitones, mal rematado,
desencastado y con poca emoción en varas. Eso hace que la afición ya se canse
de ver siempre lo mismo y siempre este en el punto de mira en los corrillos
taurinos.
Gestas
como la de Talavante son las que marcan y determinan, o al menos hacen ver que
se quiere ser figura, pero figura de verdad, de las que pasan a los libros y
posteriormente son recordadas durante mucho tiempo. Que aprenda Julián del
resto de sus “acompañantes del G10” (perdón, ahora G1 porque se ha quedado
solo) y se deje de tanta declaración sobre su contratación en Madrid. Que mate
toros de verdad y de todos los encastes y que si tiene que ir anunciado en
primer lugar en los carteles que lo haga y no vaya dando alternativas y
confirmando a todo el que pilla para no torear el primer toro. ¡Basta Ya!